Presidente Maduro Ante Imposición De La Vieja Doctrina Monroe: Venezuela No Acepta Ni Aceptará Tutelaje Alguno

En un firme pronunciamiento desde el Palacio de Miraflores, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, rechazó categóricamente cualquier intento de injerencia extranjera en los asuntos internos del país, denunciando la reactivación de la Doctrina Monroe como un instrumento de dominación imperial. “Venezuela no acepta ni aceptará tutelaje alguno. Somos un pueblo libre, soberano y decidido a defender su independencia con dignidad y coraje”, expresó el mandatario ante una multitud reunida en respaldo a su gobierno.
La Doctrina Monroe, formulada en el siglo XIX por Estados Unidos bajo el lema “América para los americanos”, ha sido históricamente utilizada como justificación para intervenciones en América Latina. En este contexto, el presidente Maduro alertó sobre los renovados intentos de imponer esta política neocolonial, que busca socavar la autodeterminación de los pueblos latinoamericanos y reinstaurar mecanismos de subordinación geopolítica.
“Hoy, como ayer, el imperialismo pretende dictar el destino de nuestras naciones. Pero Venezuela no se arrodilla. Nuestra historia está marcada por la resistencia, por Bolívar, por Chávez, y por el pueblo que no se rinde”, afirmó Maduro, rodeado de representantes del poder popular, movimientos sociales, y autoridades del Estado.
Defensa de la soberanía nacional
El jefe de Estado reiteró que Venezuela continuará fortaleciendo su modelo de democracia participativa y protagónica, basado en el respeto a la Constitución y en la voluntad del pueblo. “No necesitamos tutores. Nuestro camino lo decidimos nosotros, con nuestras propias manos y nuestras propias ideas. No hay imperio que pueda doblegar la conciencia de un pueblo despierto”, subrayó.
En su discurso, Maduro también hizo referencia a las agresiones económicas, diplomáticas y mediáticas que ha enfrentado su gobierno, señalando que forman parte de una estrategia de presión internacional para desestabilizar el país. “Nos han bloqueado, nos han atacado, pero aquí estamos, de pie, produciendo, creando, avanzando con esfuerzo y con amor patrio”, dijo.
Apoyo popular y unidad nacional
Diversos sectores del país han manifestado su respaldo a las declaraciones del presidente. Desde organizaciones campesinas hasta colectivos culturales, pasando por sindicatos y consejos comunales, el mensaje ha sido claro: Venezuela no se somete. La movilización popular en defensa de la soberanía ha sido constante, demostrando que el proyecto bolivariano sigue vivo en el corazón del pueblo.
La Asamblea Nacional, en sesión extraordinaria, también respaldó el pronunciamiento presidencial, aprobando un acuerdo en rechazo a cualquier forma de injerencia extranjera. “La soberanía no se negocia. Es principio fundamental de nuestra República”, expresó el presidente del Parlamento.
Llamado a la unidad latinoamericana
Maduro hizo un llamado a los pueblos y gobiernos de América Latina y el Caribe a cerrar filas contra el intervencionismo y a fortalecer los mecanismos de integración regional. “La CELAC, el ALBA, UNASUR, deben ser trincheras de unidad y dignidad. No podemos permitir que se repita la historia de sometimiento. Es hora de levantar la voz por la Patria Grande”, exhortó.
El presidente concluyó su intervención reafirmando el compromiso de su gobierno con la paz, la justicia social y la defensa de los derechos del pueblo venezolano. “Seguiremos construyendo una Venezuela libre, independiente y socialista. No hay doctrina imperial que pueda contra la fuerza de nuestra verdad”, sentenció.
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